“En Islandia, puedes escalar volcanes, contemplar la aurora boreal, contar ovejas y comer sus deliciosos tomates. Gracias a la energía geotérmica, Islandia es un paraíso vegetal. Los jugadores toman el papel de agricultores de hortalizas que construyen su medio de vida en esta bella isla. Pero este bucólico entorno no está exento de competencia, ya que los turistas acuden a comprar las maravillosas hortalizas locales. Poder ofrecer el mejor producto es vital para conseguir la victoria.”
Uwe Rosemberg no tiene nada que demostrar a nadie. El autor de algunos de los mejores juegos de la historia (Agricola, Le Havre, Patchwork, Indian Summer, El Banquete de Odin, Caverna) nos trae una nueva vuelta de tuerca a uno de sus temas fetiche: la gestión en la producción de hortalizas.
En Reykholt cada jugador deberá cultivar hortalizas para vendérselas a los turistas. Mediante la clásica colocación de trabajadores, habrá que ir construyendo invernaderos, sembrando y consiguiendo hortalizas para sembrar. Sin descuidar la parte administrativa y la estratégica habrá que ir sobreponiéndose a los rivales para vender más y mejor.
Nos encontramos ante un eurogame de un autor legendario. Las críticas de reseñadores sobre este juego se centran en intentar analizar si es más o menos original o si vuelve a ser mas de lo mismo. Es como decir que el quinto disco de una banda de rock legendaria es más de lo mismo. Puede ser, pero sigue siendo más de lo mismo a un nivel excepcional. Pocos autores son capaces de crear eurogames tan agradables de jugar, tan precisos, tan bien construidos y que funcionan tan bien incluso jugados en solitario (otra sello característico de este autor).
Reykholt es por tanto un juego de mesa hecho para los fans del autor o para aquellos que aún no hayan podido jugar ninguno de sus juegos. Uwe Rosemberg tiene mejores y peores juegos como todos, pero dentro de un nivel que ya quisieran algunos. Ponerse en la piel de agricultores durante unas horas siempre es un placer cuando mueves los meeples de los juegos de este gran autor.
FUNDAS – 100 cartas (75mm x 105mm)
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